La Seu Vella:
Es el símbolo de la ciudad y se ve desde muchos puntos de ella porque está en lo alto encima de un turó. Es la antigua catedral, que empezó a construirse en el siglo XIII con estilo románico y acabó siendo gótica. Destacan su precioso claustro y sus portadas románicas.
Desde lo alto de su torre hay unas excelentes vistas de la ciudad y la comarca.
Sus horarios de visita son de martes a viernes de 10:00 a 13:30 y de 15 a 17:30, los sábados de 10 a 17:30 y los domingos de 10 a 15. Todo esto de Octubre a Abril. El resto de meses es de martes a sábado de 10 a 17:30 y domingos y festivos de 10 a 15. Su precio es baratito, con los descuentos pertinentes para las personas a las que se les suelen hacer descuentos.
Justo al lado de la Seu está el Castell del Rey, también llamado la Suda. Hay una entrada conjunta para ambos monumentos. Allí coronaron a Jaume I el Conqueridor.
La Seu Nova:
Te la encuentras paseando por l’Eix Comercial, en la plaça de la Catedral. Se construyó en el siglo XVIII para sustituir a la otra que estaba muy vieja, y es de estilo barroco. En su interior hay una imagen de la Verge de Montserrat. La entrada es gratuita y sus horarios de visita son de lunes a sábado de 9:30 a 13:00 y de 17:30 a 19 y los domingos y festivos igual pero hasta las 20:30.
Enfrente está el antiguo hospital de Santa María, edificio del siglo XV que ahora es la sede del instituto de estudios ilerdenses y también hay gente que lo visita. La entrada es gratis, de martes a viernes de 10 a 14 y de 18 a 20:30, los sábados de 12 a 14 y de 17 a 20:30 y los domingos de 12 a 14. En verano abre hasta las nueve de la noche.
El Palau de la Paeria:
En la plaça de la Paeria, otra de las que cruza l’Eix Comercial. La Paeria es el órgano de gobierno de la ciudad, por lo tanto el ayuntamiento. El edificio es del siglo XII y en su interior hay un patio con un pozo, bonitas salas, un museo e incluso una mazmorra.
Entrada gratis de lunes a sábado de 11 a 14 y de 17 a 20 y los domingos y festivos de 11 a 14.
Desde la plaça de la Paeria, parte un callejón que da a la avinguda del Segre, l’arc del Pont. Es un curioso arquito que es la antigua entrada a la ciudad.
L’Esglesia de SantLlorenç:
Por los callejones que hay por encima de la nueva catedral, en la plaza del mismo nombre, se encuentra la iglesia más antigua después de la Seu Vella. Es del siglo XII, románica con detalles góticos. La entrada es gratuita y sus horarios de lunes a viernes de 9:30 a 12:30 y de 17 a 19, sábados de 11 a 12:30 y de 17 a 19 y domingos y festivos de 11 a 12:30.
Museo de Lleida:
Es un edificio moderno que alberga el museo Diocesano y comarcal. Está en la calle SantCrist, una de las que cruzan la Rambla de Aragó, cerca del centro. Tiene una parte histórica y antropológica que nos da un repaso a la historia de la ciudad y las distintas civilizaciones que por ella han pasado.
Tiene otra parte artística donde hay un poco de todo y de todas las épocas; pinturas, esculturas, mosaicos, etc.
Castell de Gardeny:
Es un castillo templario que hay en una colina en las afueras de la ciudad. Lo construyó la orden del temple en el siglo XII. Se puede visitar y además desde él se obtienen muy buenas vistas de la ciudad.
El parc de la Mitjana:
Situado en las afueras al noreste de la ciudad. Se trata de un espacio natural, fluvial, con fauna propia, pero totalmente habilitado como parque para el disfrute de los ciudadanos.
Parque de los campos Elíseos:
Situado en el centro de la ciudad, por debajo del río. Es el típico parque grande que hay en todas las ciudades; como la ciudadela de Barcelona, Retiro de Madrid, Central Park de Nueva York… pero ya que Lleida es algo más pequeñita que estás ciudades, pues su parque también lo es. No tiene nada de especial más que algunas fuentes y un palacio de vidrio, pero no está mal.