Piazza San Giovanni: Duomo
Es la más importante de la ciudad, porque en ella está el monumento más emblemático; el Duomo.
En realidad son tres elementos pegados formando uno solo; el Baprtisterio, el Duomo y el Campanile.
Respecto a estas tres bellezas arquitectónicas, primero hablaré de mis sensaciones particulares, y después ya trataré de explicar lo que diría una guía que no fuese una truño guía. A mí me impresionó muchísimo el contraste entre la catedral y su entorno; está situado en una plaza en la que cabe con calzador, y aunque es una zona muy céntrica repleta de edificios antiguos, no te esperas al girar la esquina, encontrarte semejante majestuosidad en un enclave tan urbano.
Por otro lado, no se parece en nada a las iglesias y catedrales que he visto en otros lugares (tampoco es que yo sea un experto, igual resulta que hay muchas más así…), parece un decorado, una enorme casita de caramelo aparecida de repente en medio de un entresijo de callejones.
Dejando aparte mis explicaciones de tarado, el Duomo de Florencia se llama en realidad Santa María del Fiore, y se construyó, por lo menos con su aspecto actual, entre 1245 y 1302, aunque la fachada principal que se había dejado inacabada, se completó en el siglo XIX. Es de estilo gótico italiano y está revestida de mármoles coloreados (supongo que siempre es más acertado describirla así que como casita de caramelo…hum).
En su interior, pese a que su decoración es bastante austera y escasa de luz, se pueden encontrar frescos y esculturas de muchos artistas del renacimiento, como Michelangelo o Brunelleschi entre otros, o un fresco de Domenico Michelino donde Dante presenta a Florencia la divina comedia.
Su cúpula, del siglo XV, construida por un tal Filippo Brunelleschi, que está enterrado ahí mismico. y en su interior un enorme fresco del juicio final.
La entrada al Duomo es gratuita, pero para la cúpula ya tienes que pagar. Horarios: de lunes a miércoles y viernes de 10h a 17h; jueves de 10h a 15:30h; sábados de 10ha 16.45h; domingos y festivos de 13:30h a 16:45h.
Al lado, Il Campanile di Giotto (el tipo que lo construyó), construida en el siglo XIV, es el punto más alto de la ciudad con 84 metros, se puede subir a la azotea (y hasta tirarte si quieres…) y desde él se obtienen magníficas vistas. Prepárate a subir escaleras, eso sí. Se puede visitar todos los días de 8:30 a 19h.
Y por delante de estos, el Battistero di San Giovanni, que es el más antiguo de los tres, y el horario de visita es el mismo que el del Duomo.