Un poquitín de historia: 
 
No es que Madrid no existiese antes de ser capital, ya que los primeros asentamientos humanos junto al Manzanares datan de la prehistoria, y durante la época de los romanos y los visigodos, también había una población estable aunque de carácter muy rural.
 
Pero cuando nace Madrid como tal, es en el siglo IX, en la época del Al-Andalus, cuando deciden construir una fortaleza para vigilar los pasos de la sierra de Guadarrama, y junto a ella crece un poblado que se llamará en un principio Magerit.
 
En el siglo XI pasó a formar parte del Reino de Castilla. Desde entonces Madrid pasó a ser cristiana, e incluso con una gran presencia judía en el actual barrio de Lavapiés, y empezó a crecer bajo el mandato de distintos reyes, llegando a otorgársele la categoría de Villa en el 1123. 
 
Durante los siglos siguientes la ciudad fue creciendo en importancia y en varias ocasiones se reunieron en ella las Cortes de Castilla.
 
 
Pero la corte se instala definitivamente en Madrid en 1561, por deseo expreso de Felipe II, y a es a partir de ese momento cuando da un salto en su historia y empieza a crecer en todos los sentidos. Fue la época del Madrid de los Austrias (así se llama a esta dinastía monárquica) y comprende la zona de la plaza del Sol, plaza de Oriente, Lavapiés y alrededores.
Después vino la dinastía de los Borbones, en el siglo XVIII, que decidieron cambiar la ciudad, repleta de callejones sucios y escasa de servicios, y construyeron puntos tan emblemáticos como la Cibeles, Neptuno, el paseo del Prado, Recoletos o el Palacio Real.
 
                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                           
 
En el siglo XIX, tras pasar por la guerra de la independencia, nace el museo del Prado y se derriba la cerca construida por Felipe IV lo que permite la expansión de la ciudad, creando un ensanche bien estructurado con barrios como Salamanca o el paseo de la Castellana. También llega el tren a la ciudad. Y sigue creciendo…
 
A principios del siglo XX Madrid alcanza el millón de habitantes y tras pasar por la República llega la guerra civil del 1936 y posteriormente la dictadura. Serán tiempos de pobreza, asesinatos políticos y represión, no solo aquí, en Madrí, sino en toda España. Por otro lado la ciudad empieza a crecer desmesuradamente y de forma desordenada como consecuencia de la inmigración procedente de zonas rurales y muchos pueblos cercanos se anexionan a la ciudad creando multitud de barrios suburbiales.
 
 
Llegada la democracia en 1975, Madrid sigue en su papel de gran capital de España cuyo crecimiento a todos los niveles parece no tener límites.
 
Uno de los puntos más negros de la historia de la ciudad llega en el siglo XXI, el 11 de Marzo de 2004, como consecuencia de un acto terrorista perpetrado por la banda radical islamista Al-Qaeda en la que murieron 192 personas al explotar diez bombas repartidas en varios trenes de cercanías. España entera salió a la calle para mostrar su repulsa ante semejante atrocidad, aunque lamentablemente de poco sirvió.