Sevilla es una ciudad bastante grande, aunque es cierto que todo lo turístico está muy cerca, con lo cual, si como yo, eres de vivir la ciudad más que de visitar monumentos y echar cuatro fotos entre tapita y cerveza, en un par de días intensos debería ser suficiente para hacerte una idea completita de lo que es la ciudad. Toca patear de lo lindo, eso sí.

De todas formas, para mucha gente, Sevilla exige algo más que patearla y echar cuatro fotos, es un lugar para recrearse, para visitar a fondo sus monumentos, sin dejar de entrar en contacto con la ciudad y su ambiente. Y si haces eso, si entras a todo, vas a necesitar 4 días para ir tranquilo, y si ya tienes una edad, con más motivo.

Voy a enumerar los puntos emblemáticos, lo que en otras guías más turísticas dicen “lo imprescindible de Sevilla”, más o menos ordenado en distintos recorridos por zonas, para que después tú te lo montes a tu manera. Después, por supuesto, se trataría también de callejear sin ton ni son por alrededor de lo que vieras, como en todas las ciudades, vamos.