Para acceder al casco antiguo, más allá de si encuentras un autobús o tranvía que te vaya bien desde tu hotel, el metro más adecuado es el de piazza Spagna. Los autobuses que te dejen en piazza Venezia también te van bien.

Más allá de lo que yo te ponga, lo de todos los cascos antiguos…recórrelos, piérdete sin demasiado rumbo, y te irás encontrando iglesias, palacetes, historia por los cuatro costados, combinado con una arquitectura muy reconocible de Roma, y mucho ambiente de terraceo y tienda. También miles de turistas, pero como nosotros también lo somos, no nos vamos a quejar.

CALLE CORSO:

Parte de piazza Venezia y esta, y las de alrededor, son las que contienen más tiendas de moda y de todo tipo. Así que intenta ir en horario comercial. La de las tiendas de más lujo es vía Condotti (la de la foto), que es una de las que desemboca en piazza Spagna. No hay mucho que comentar, pero hay que pasar. 

PIAZZA SPAGNA:

Es uno de los puntos más emblemáticos de la ciudad. Una plaza con una fuente y unas escalinatas que al final tienen una iglesia, y que vale la pena subir para contemplar la plaza desde arriba. Debe su nombre a la embajada de España que siempre ha estado por ahí. Poco más que comentar, pero imprescindible ir.

PIAZZA DEL POPOLO:

Al otro extremo de la vía Corso (recuerda que parte de piazza Venezia), encontramos la piazza del Popolo. Es la entrada al centro por otro lado. Una plaza redonda, con un obelisco en medio y dos iglesias del siglo XVII, idénticas, una al lado de la otra.

FONTANA DI TREVI:

Impresionante fuente barroca que tiene la figura de Neptuno como pieza central y ubicada en una pequeña plaza, lo cual la hace aún más atractiva. Tiene sus orígenes en un pequeño manantial descubierto en el siglo 19 a.c. A partir de ahí la fuente se ha ido modificando a lo largo de los siglos, interviniendo distintos arquitectos entre los que destaca Bernini, hasta adoptar su forma definitiva desde el siglo XVIII hasta ahora. Existe la tradición de que, si echas una monedita de espaldas al agua, volverás a Roma.

PANTEÓN DE AGRIPA:

Otro de los emblemas de la ciudad, y de los monumentos que te quitan el hipo cuando te los encuentras allí en medio de una plaza como si fuese un quiosco o una farola. Vale la pena que entres porque su cúpula, de más de 43 metros de diámetro, es impresionante. Fue construido al inicio de la época del imperio romano y es un templo destinado a la veneración de los dioses. Al lado del Panteón, está la Piazza Minerva, una plaza muy bonita con una iglesia.

Hay taquillas en la entrada. Antes era gratis, desde hace un tiempo ya hacen pagar. Así que, una vez más, para evitar colas, mejor cómprala por internet.

PIAZZA NAVONA:

A mí, que siempre repito en mis guías, que soy un turista mucho más urbano que cultural, es lo que más me gusta de Roma. Sé que mucha gente no estará de acuerdo, porque Roma culturalmente tiene tanto, y además tan bello…pero a mí su forma, sus edificios tan romanos, su vida; invadida por los músicos, caricaturistas y artistas varios, donde apetece mucho sentarse a tomar una copa en sus terracitas, aunque lógicamente te pegan una buena clavada. …me tiene  enamorado.

Después, tampoco está exento de arte. En medio una fuente barroca, Fontana dei Fiumi, de Bernini. El aspecto actual de la piazza data del siglo XVII, pero en la época del imperio romano, en su lugar se hallaba un circo donde se organizaban juegos al estilo griego, es decir, no eran violentos como los del Colosseo, y tenía capacidad para unas tres mil personas.

CAMPO DEI FIORI:

Por debajo de Navona, ya cerca del río Tiber, está el campo dei Fiori. Un mercado al aire libre, con toda su esencia medieval y su dinamismo popular italiano, donde venden flores y comida. Es recomendable que sepas que solo lo ponen de lunes a sábado y de ocho a una. No es una frikada mía, que siempre me gusta ver mercados y cosas así, es algo que te recomendarán en todas las guías.

Junto al Campo dei Fiori, en piazza del Biscione, hay un restaurante, Pancrazio, donde aparte de su comida que no es barata (tampoco es de lujo, pero pica un poco), tiene la gracia (¡¡¡olee!!!) de que en su sótano están las ruinas de lo que fue un antiguo teatro romano, el de Pompeyo.

BARRIO JUDIO:

Por debajo del campo dei Fiori y tocando al río, pero no las calles inmediatamente de debajo. Si quieres una referencia para poner en Google maps, una de sus plazas principales sería la piazza delle cinque Scole. Nada concreto que decir, pero vale la pena recorrer sus calles, y te irás encontrando rincones entrañables, alguna que otra sinagoga, alguna ruina romana como el antiguo teatro Marcelo, y algún que otro judío hasidim, ya que es un barrio judío que aún conserva cierta actividad.